�Hola All!
Xavier Vali�o, a trav�s de la lista de correo E3Musica de Yahoogroups, ha compartido esta semana la noticia de que KLF hab�a vuelto, 23 a�os despu�s, tal
como hab�a prometido cuando desaparecieron hace esos mismos a�os.
Aprovecho para compartir un texto suyo, publicado en un libro con otras referencias, en el que explica la historia y milagros de los KLF.
Os lo recomiendo.
Ya sab�is que descatalogaron todos sus discos y dijeron que
desaparec�an como tal durante 23 a�os. Pues hace unos d�as se
cumplieron los 23 a�os y lo celebraron con tres d�as de actos
'at�picos' (por decir algo) en Liverpool. Alguien asisti� a algunos y
ha hecho esta pel�cula casera de hora y media, con momentos como
Jarvis Cocker cantando el "Justified and Ancient" entre un coro de
calaveras y cosas as�. No tiene desperdicio:
https://www.youtube.com/watch?v=MhYtYRD75fg
*The KLF: la historia m�s grande jam�s contada*
�Qu� co�o est� pasando? ("�What The Fuck Is Going On?"; The KLF)
The KLF ten�an que estar aqu�. Si estrechamos m�s de lo normal los l�mites de este libro, son casi el �nico grupo que se lo merece. The
KLF fueron el punk; m�s concretamente, el punk de la m�sica de baile,
aunque con una diferencia crucial: The KLF s� lo siguieron al pie de
la letra y casi sin pretenderlo. Nunca tuvieron un m�nager o una
compa��a discogr�fica poderosa detr�s. Nunca se movieron por dinero. Y
se les puede atribuir algunas de las acciones m�s punk jam�s
perpetradas por un grupo de �xito.
A�n hoy, The KLF son casi una entidad an�nima. Mucho m�s a�n fuera de las Islas Brit�nicas. Sin entrar en muchos detalles, se puede afirmar
que Bill Drummond era el cerebro para la acci�n y Jimmy Cauty el
cerebro musical del grupo. Juntos parieron proyectos sin fin que
fueron, al mismo tiempo, deslumbrantes, est�pidos y subversivos.
A pesar de ser ya entonces padres de familia, se comportaban a veces como terroristas concienciados para, al minuto, parecer adolescentes descerebrados. M�s de una vez modificaron los anuncios publicitarios
para traerlos a sus inexistentes causas. Robaron retazos de un buen
mont�n de canciones conocidas y las colocaron en su debut de 1987,
What The Fuck's Going On?, toda una declaraci�n a favor de la cultura
del sample y del hip-hop. No era simplemente desgana, sino
provocaci�n: la estrategia de subrayar las absurdas normas de la
sociedad para destrozarlas descaradamente a continuaci�n.
En los cinco a�os en los que pasaron de ser una m�s que simp�tica novedad en el mundo de la m�sica de baile a unos artistas de �xito
masivo con credibilidad, para acabar, m�s tarde, otra vez en el punto
de partida, el d�o nunca se comprometi� con nada ni nadie.
Quemaron un enorme hombre de paja en una isla remota para celebrar el
solsticio de verano. Intentaron comprar todo el espacio disponible en
la revista musical m�s influyente del mundo, New Musical Express, s�lo
para colocar all� sus propios art�culos. Incluso, en sus momentos m�s desquiciados, pensaron seriamente en amputarse una mano o cortar con
una sierra el�ctrica las piernas de un elefante delante de la plana
mayor de la industria musical brit�nica. Y, no menos importante,
editaron unos cuantos discos brillantes.
Tambi�n se gastaron una fortuna en comprar coches blindados y
submarinos. Pagaron por anuncios de televisi�n que nadie comprendi� en
su momento e hicieron pel�culas que casi nadie lleg� a ver. Dieron el
dinero que recibieron por alguna de sus actuaciones al p�blico
asistente. Al final, cuando consiguieron un �xito desbordado en 1991,
tomaron m�s dinero del que nunca podr�an gastar y lo quemaron,
convirtiendo sus cenizas en un ladrillo.
Provocadores o lun�ticos, c�nicos u oportunistas en busca de
publicidad, vivieron m�s intensamente esos cinco a�os que la mayor
parte de los grupos en toda su extensa carrera. Ni siquiera se paraban
a explicar sus acciones o a intentar acaparar la atenci�n de los
medios; de hecho, muchos de sus golpes se produjeron lejos del ojo
p�blico. Toda la iron�a e impacto teatral de sus acciones ten�a una
esencia rom�ntica y m�stica, un sentimiento de que hay m�s en esta
vida y, sobre todo, de que puede haber mucho m�s en el rock que
simplemente dejarse llevar.
As�, se convirtieron en algo m�s importante de lo que ellos mismos
pudieron imaginarse. Por todas estas razones, conviene recordarlos.
The KLF vivieron bajo distintas encarnaciones: Lord Rock y Time Boy,
The Timelords, Rockman Rock y Kingboy D., The Justified Ancients Of Mu
Mu, The JAMs, The Forever Ancients Liberation Loophole, The FALL, The
K Foundation... Tanto nombre no ocultaba m�s que a Bill Drummond y Jimmy
Cauty. �sta es su historia en com�n, al menos la que nos han dejado
conocer.
Bill Drummond, nacido en Sud�frica en 1953, se inicia en la m�sica
formando parte del grupo punk de Liverpool Big In Japan, con Ian
Broudie -m�s tarde l�der de The Lightning Seeds-, y Holly Johnson -posteriormente cantante de Frankie Goes To Hollywood-. En 1978 crea
Zoo Records y empieza a editar discos de bandas como Echo And The
Bunnymen o The Teardrop Explodes -la banda de Julian Cope-, grupos de
los que se convierte en m�nager.
Tras una agria ruptura con ambos grupos, pasa a trabajar en la
multinacional WEA como responsable de bandas como Strawberry
Switchblade, Zodiac Mindwarp And The Love Reaction o Brilliant, el
grupo en el que milita Jimmy Cauty y que era producido por el entonces imbatible triunvirato comercial que formaban Stock, Aitken y Waterman.
Al no alcanzar Brilliant el �xito en su pa�s, Bill Drummond deja su
trabajo en 1986 para, a continuaci�n, grabar su primer disco en
solitario, The Man, editado por la reputada discogr�fica Creation. En
�l aparece la pol�mica "Julian Cope Is Dead" ("Julian Cope est�
muerto"), en respuesta a la canci�n "Bill Drummond Said" ("Bill
Drummond dijo") que se encontraba en el �lbum Fried de Julian Cope.
A partir de ese momento, comienza la colaboraci�n musical con Jimmy
Cauty. Jimmy, que hab�a nacido en Devon en 1956, hab�a sido el
guitarrista de Brilliant justo antes de formar uno de los grupos clave
en la imparable ascensi�n posterior de la m�sica de baile, The Orb,
junto a Alex Paterson. Tras dejarlo, forma The KLF con Bill Drummond.
M�s adelante, con el alias de Acoustic Advanced Armament (Armamento
Avanzado Ac�stico), experimentar�a con armas de baja frecuencia que le
compra al Ministerio de Defensa brit�nico.
Durante los cinco a�os que The KLF funcionan a pleno rendimiento,
consiguen varios n�meros uno en las listas de singles, otros tantos
que se quedan entre los cinco de m�s �xito y venden m�s de siete
millones de copias de sus �lbumes, en especial de The White Room. Los
n�meros, ya se sabe, poco dicen, pero resulta curioso que tomaran las
listas al asalto unos tipos a los que nadie identificaba por la calle
y que han dejado para la posteridad una forma de actuar, cuando menos,
at�pica.
En marzo de 1987 Bill Drummond y Jimmy Cauty se unen bajo el nombre de
The Justified Ancients Of Mu Mu, tambi�n conocidos como The JAMs. Su
nombre lo extraen del libro Illuminatus! de Robert Anton Wilson, una
trilog�a de ciencia-ficci�n en el que The Justified Ancients Of Mu Mu
eran los Se�ores del Desgobierno, cuyo �nico objetivo era llevar el
caos adondequiera que fueran. Nada m�s apropiado, seg�n se tendr�a
ocasi�n de comprobar poco despu�s.
Su primer single, "All You Need Is Love", se convierte en un �xito en
las pistas de baile con un contenido un tanto at�pico, ya que hablaba
de la cobertura que por entonces se le estaba dando al SIDA, e inclu�a
samples de las noticias de la BBC, de la explosiva Sam Fox y de los
mism�simos Beatles.
Todo el mundo baila la canci�n en los clubes, pero nadie compra el
disco. Cuando se reedita para evitar problemas con los derechos de
autor, llega a ser un relativo �xito en las listas independientes, convirti�ndose en uno de los primeros grupos en llevar a las listas la
t�cnica de los samples, o peque�os muestreos de canciones de otros
artistas para configurar una nueva.
El �lbum que le sigue ya avanza lo que se viene encima desde el
t�tulo, 1987 (What The Fuck's Going On) (1987, �Qu� co�o est�
pasando?). La t�cnica de cortar trozos de canciones de otros artistas
y pegarlas para hacerlas suyas se convierte en la marca de un disco
que se promociona colocando un cartel publicitario gigante con letras
blancas en un rascacielos.
En el disco hay una canci�n, "The Queen And I", que ten�a algo m�s que
peque�os trozos del archiconocido "Dancing Queen" de ABBA. El grupo
sueco, a trav�s de su compa��a discogr�fica y de su m�nager,
probablemente inc�modos por el t�tulo del �lbum, pide que se retiren
todas las copias del disco y se destruyan.
Ni cortos ni perezosos, Bill Drummond y Jimmy Cauty meten todas las
copias existentes a�n no vendidas de su disco en el maletero de un
coche y se embarcan en un ferry rumbo a Suecia junto a un periodista
del New Musical Express, con la idea de convencer a los componentes
del grupo n�rdico m�s famoso de la historia del pop.
Al no conseguir ni tan siquiera aproximarse a ABBA, deciden enviarles
un mensaje en forma de disco de oro a trav�s de una prostituta sueca.
En el viaje de vuelta hacia el ferry, encuentran un id�lico bosque en
el que prenden fuego a la mayor�a de copias del disco -otra peque�a
parte la tiran por la borda del ferry y las 150 copias restantes se
las quedan, por lo que pueda pasar-. La humareda que se levanta atrae
la atenci�n de un granjero armado que la emprende a tiros con ellos.
En su retirada, a�n tienen tiempo de hacer unas fotograf�as que
servir�an para la portada de su segundo disco.
Poco despu�s, los representantes de ABBA acceden a retirar los cargos
de la denuncia interpuesta siempre que no se fabriquen m�s discos. The
KLF aceptan y, acto seguido, editan una versi�n censurada de su disco
sin los fragmentos pol�micos y con largas partes en blanco, aunque con instrucciones sobre como recomponer el disco original.
Evidentemente, no se han arrepentido lo m�s m�nimo y, para su
siguiente single, "Whitney Joins The JAMs" ("Whitney se une a The
JAMs") utilizan numerosos samples de Whitney Houston. El single se
distribuye entre distintos pinchadiscos y nunca se llega a editar comercialmente.
De todas formas, algo del revuelo ocasionado llega al o�do de la diva estadounidense -probablemente bastante alejado de lo que era la
aut�ntica realidad-, ya que les ofrece remezclar una de sus canciones.
The KLF lo rechazan. A Whitney Houston no le convence la negativa y
trata de persuadir a los productores de su primera pel�cula, El
guardaespaldas, para que The KLF sean los compositores de la banda
sonora.
Antes de que los productores se vean obligados a darle una negativa a
la estrella estadounidense, The KLF rechaza la propuesta de nuevo, y
la banda sonora se convierte en la m�s vendida de la historia. En su
lugar, ellos editan un segundo disco, Who Killed The JAMs? (�Qui�n
mat� a The JAMs?)
Su siguiente single se convierte en un n�mero uno inmediato. Editado
bajo la encarnaci�n de The Timelords, la canci�n "Doctorin' The
Tardis" parece una enorme tomadura de pelo con una frase, "You Wot?"
("�T� qu�?"), repetida por encima de la melod�a del "Rock'n'Roll" de
Gary Glitter y samples de "Blockbuster" de The Sweet y de la sinton�a
de la serie de televisi�n Dr. Who.
No contentos con ridiculizar a la industria del disco brit�nica con
una est�pida canci�n en la que ni siquiera hab�an tocado, el d�o
presenta su nuevo grupo como una banda liderada por un coche americano
policial de los 70. Seg�n la campa�a de promoci�n, el coche asegura
ser "una criatura de los 70 y pens� que si mezclaba dos de los
elementos esenciales de la d�cada, Dr. Who y Gary Glitter, tendr�a un
�xito en mis manos".
Como no les ha resultado especialmente complicado llegar a lo m�s alto
de las listas, publican su f�rmula en un libro titulado The Manual
(How To Have A Number One The Easy Way) -El manual (C�mo conseguir un
n�mero uno f�cilmente)-. En �l revelan sus "'zenarquistas' m�todos
usados para conseguir que lo impensable se convierta en realidad", y
ofrecen instrucciones pr�cticas y completamente detalladas para
alcanzar un n�mero uno a la primera intentona. "No se necesita
experiencia previa", aseguran.
Adem�s, garantizan los resultados con una oferta tipo hipermercado: si
en tres meses no se consigue un n�mero uno en las listas brit�nicas,
devolver�n el dinero pagado por el libro. Eso s�, ponen la condici�n
de que se deben seguir sus instrucciones al pie de la letra.
'Lo primero es un ritmo de baile irresistible. Cuando escribimos esto,
estamos en el 'verano del amor' de 1988 y aconsejamos a todo el mundo
que est� buscando el ritmo perfecto que pasen la noche en una fiesta
de acid house, que beban poco alcohol, que pierdan su cabeza en la
pista de baile y que agiten sus brazos en el aire hasta que lo
sientan. Por supuesto, las drogas son algo que no puede parecer que recomendamos, pero entendemos que un narc�tico muy conocido consigue
aclarar todo esto mucho mejor', indicaban en su manual.
Que se sepa, al menos un d�o austriaco llamado Edelweiss sigue sus instrucciones y vende m�s de un par de millones de copias de su single
"Bring Me Edelweiss", que utiliza samples de otra canci�n de -venga
cebarse con ellos- ABBA, "SOS", coloc�ndolo en el n�mero uno de varios
pa�ses europeos. S�lo llegan al n�mero cinco de las listas del Reino
Unido pero, con deportividad, no reclaman las 5 libras y 99 peniques
de su compra (unos 8,5 euros).
Tras anunciar la banda sonora de una pel�cula que nunca nadie ve y
editar el que es, probablemente, el disco de chill-out m�s extremo
jam�s grabado, Chill-Out -que, adem�s, se puede considerar un
precursor del g�nero-, publican un single con el t�tulo de "Kylie Said
To Jason" ("Kylie le dijo a Jason").
Conviene recordar que, por aquel entonces, los dos mayores �dolos de
los adolescentes, Kylie Minogue y Jason Donovan, sal�an juntos, as�
que la perspectiva de un d�o en la cima de su creatividad y
credibilidad hablando de tales personajes entra�aba el riesgo m�s que
evidente de que su carrera se precipitara al vac�o inexorablemente.
A partir de ese momento, se les conoce tambi�n como The KLF (Kopyright Liberation Front, Frente de Liberaci�n de los Derechos de Autor), convirti�ndose en el d�o de m�s �xito del momento y, con ello, el
dinero empieza a pesarles en sus cuentas corrientes.
Necesitan urgentemente explicarse. En una de sus escasas entrevistas
dejan caer lo que se podr�a entender como su manifiesto: "Empezamos reaccionando contra 25 a�os de historia del rock'n'roll. Nos inspir�
el rap y el hip-hop, pero nos sali� algo punk. Despu�s lleg� la escena
de la m�sica de baile y, obviamente, tambi�n se trataba de reaccionar
contra la misma clase de cosas".
Puede que tales palabras fueran lo m�s serio que nunca llegaron a
decir, as� que a continuaci�n, en la misma entrevista, dejaban a su interlocutor totalmente desorientado al adelantar su intenci�n de
comprar un submarino y de grabar un disco techno a bordo del tren Transiberiano. Con tales antecedentes, hasta pod�a sonar totalmente
cre�ble.
Pocos meses m�s tarde, a finales de 1990, graban un disco que tampoco
llega a editarse nunca. Seg�n ellos, a mediados de 1990, mientras
estaban en una rave -fiesta ilegal de m�sica de baile organizada espont�neamente-, el sonido se par� y todo lo que se pod�a escuchar
era la lluvia, las f�bricas cercanas, los coches en las carreteras
circundantes y un bajo y una bater�a a lo lejos.
Esos ruidos son, exactamente, los que componen su siguiente grabaci�n,
sesi�n que se finaliza tras pasar s�lo 45 minutos en el estudio. El
disco, sin dato alguno, se lo hacen llegar a las puertas de los
domicilios de distintos pinchadiscos, solicit�ndoles que elijan un
t�tulo entre los ocho que proponen.
En �l s�lo se encuentra una inscripci�n en la que se puede leer "It's
Grim Up North" ("El Norte es horrible"). Poco despu�s, aparecen
algunos grandes carteles en las vallas publicitarias de distintas
autopistas cercanas a Londres con esas palabras, lo que irrita a
algunos conductores que piden a las autoridades que sean retirados de inmediato. Tan s�lo aquellos que hab�an recibido el disco pod�an
relacionar ambos hechos, ya que nadie se hac�a responsable de los
carteles.
Otro cartel publicitario llama la atenci�n a principios de 1991. Donde
un peri�dico se hab�a anunciado con "The Gulf: The coverage, the
analysis, the facts" ("El Golfo: la cobertura, el an�lisis, los
hechos"), en relaci�n a la reci�n iniciada Guerra del Golfo P�rsico,
alguien tacha las letras Gu y las cambia por una K, con lo que el
cartel pasa a decir: "The KLF: la cobertura, el an�lisis, los hechos".
Son demandados y se libran de la c�rcel con una fianza.
En el mes de febrero de ese a�o, el d�o tiene previsto participar en
la ceremonia de entrega de los Brits, los premios musicales de la
industria brit�nica, pero la invitaci�n les es retirada despu�s de
descubrirse que iban a aparecer montados en un par de elefantes y
rodeados de �ngeles blancos y guerreros zul�es que ir�an armados con
lanzas y flechas.
Nada extra�o, pues, que para celebrar el solsticio de verano inviten,
en el mes de junio, a un grupo de 50 periodistas, amigos y gente de la industria a volar desde Londres a un destino desconocido. El curioso
grupo aparece en la Isla Jura, una de la H�bridas interiores, donde,
tras pasar un 'control de pasaportes', en el que Bill Drummond hace de
oficial de uniforme, se les pide que vistan unas t�nicas amarillas
para interpretar el papel de druidas y que vayan rumiando 'moooo'
mientras siguen una procesi�n ritual por la isla.
En una playa apartada asisten a la quema de un hombre de paja de unos
18 metros de alto en el que hab�an insertado previamente dinero en
met�lico. 'Los Ritos de Mu', que es como se les presenta el ritual a
los alucinados invitados, acaba con una fiesta rave regada por
champ�n. Al d�a siguiente, el mismo grupo de invitados sube al
escenario de un concierto en Liverpool para hacer los coros de su
single "Justified And Ancient" ("Justificado y viejo") mientras que
The KLF se dedican a vender helados a la audiencia.
En noviembre de ese mismo a�o reaparecen como The JAMs con una versi�n
hardcore de "It's Grim Up North" y editan como The KLF su single
"Justified And Ancient", con la colaboraci�n en las voces de la
estrella del country Tammy Wynette en lo que ser�a el primer �xito
para �sta en las Islas Brit�nicas tras m�s de 20 a�os.
El v�deo, rodado en los estudios Pinewood, lugar en el que se filman habitualmente las pel�culas de James Bond, incorpora guerreros
tribales, guitarristas que portan hachas, el submarino y la camioneta
de helados que el grupo acaba de comprar, druidas y helados gigantes.
Tammy Wynette se pregunta c�mo es que han pensado en ella y reconoce
que no sabe si podr� seguir las partes vocales a ritmo de hip-hop tan r�pidamente como se le requiere. Adem�s, reconoce sentirse
completamente desorientada en medio de semejante l�o. "El escenario de
James Bond es un caos la mayor parte del tiempo", declara, "y Bill y
Jimmy parece que se han tra�do un mundo con ellos. Pero seguro que
todo tiene sentido cuando se acabe. El mundo de Mu Mu parece m�s
interesante que Tennesse, aunque no me gustar�a vivir en �l".
Tan s�lo unas semanas despu�s, The KLF sit�an otro single en las
listas, en este caso una versi�n de "3 a.m. Eternal" embrutecida por
el ruido de su colaboraci�n con el grupo de metal Extreme Noise Terror
(Terror del Ruido Extremo).
Su �xito les lleva a participar en la gala de entrega de los premios
Brits en febrero de 1992. Esta vez no es posible cancelar la
invitaci�n, ya que son el grupo del momento y al que todos quieren ver
en acci�n. De todas formas, la organizaci�n les retira unos cubos de
sangre que pensaban tirar a la audiencia, compuesta por artistas y
gente de la industria musical.
Por su parte, el grupo Extreme Noise Terror, sus compa�eros en la escenificaci�n ruidosa que van a hacer de "3 a.m. Eternal" les
comunican que si siguen con sus planes de destripar una oveja muerta
en el escenario, no saldr�n con ellos. "�Somos vegetarianos!", alegan
para justificarse.
Pero ellos no se arredran y cambian de planes. Su actuaci�n se
convierte en la m�s recordada de su carrera, tanto por el hecho de ser televisada, como por el impacto que deja en todos los que pudieron contemplarla, habituados a apariciones anodinas de artistas inocuos o
que no se salen del gui�n.
Bill Drummond aparece en escena caminando con la ayuda de unas
muletas, debido a una reciente ca�da, y con una falda escocesa y una
cazadora de cuero por vestimenta, gritando: "�Esto es la libertad de
la televisi�n!" Tras interpretar "3 a.m. Eternal" saca una metralleta
y dispara balas de fogueo a la audiencia, a la que tambi�n arrojan no
se sabe bien qu� sustancias l�quidas.
Despu�s, se lanzan a una batalla campal con sus guitarras, rompen los micr�fonos y se marchan anunciando "The KLF ha abandonado la industria musical", una cita similar a la de uno de los �ltimos conciertos de
Elvis Presley en el que una voz an�nima, para atajar los disturbios
provocados por sus fans, inform�: "Elvis Presley ha abandonado el
edificio". Al mismo tiempo que ellos, algunos de los invitados a la
entrega de premios se marchan del auditorio indignados.
Curiosamente, tras su actuaci�n se conoce que el grupo ha logrado el
galard�n al mejor grupo brit�nico del a�o -�junto a Simply Red!- y, en
su retirada, deciden enviar a un mensajero a recogerlo. Aunque la
organizaci�n lo impide, el motorista se lo arranca de las manos a
Martika, la cantante que se lo iba a entregar, y tienen que
recuperarlo por la fuerza.
En la fiesta posterior a la ceremonia, el d�o se presenta en la puerta
del Hotel Royal Lancaster Gate y deja el cad�ver de una oveja en la
puerta con una nota que dice: "He muerto por vosotros". Casi nadie
sabe que la oveja se ha convertido en motivo recurrente del grupo en
sus portadas y en algo as� como su talism�n desde que apareciera en la
car�tula de Chill-Out.
En mayo del mismo a�o, el grupo se paga un anuncio a toda p�gina en
la publicaci�n New Musical Express anunciando que deja de existir y
que descatalogan todos sus discos, renunciando, por lo tanto, a los
m�s que abundantes derechos de autor que est�n por llegar, justo en el
momento de mayor �xito comercial.
Durante 1993, en la prensa comienzan a aparecer anuncios a toda
p�gina. El primero habla de que La Fundaci�n K, su nuevo alias con el
objetivo de promover "el avance de la creatividad", ha pagado la
grabaci�n de una canci�n, "K Ser� Ser� (War Is Over If You Want It)"
("K Ser� Ser�. Las guerras se acaban si quer�is"), en la que colabora
el Coro del Ej�rcito Ruso, y que ser� editado s�lo cuando se consiga
la paz mundial.
Los principales administradores de la Fundaci�n, Bill Drummond y Jimmy
Cauty, emiten un comunicado en el que alegan que ellos no tienen nada
que ver con la grabaci�n, ya que han abandonado el mundo de la m�sica.
Por supuesto, la canci�n, que llega a escucharse en lugares como el
Festival de Reading, nunca ve la luz comercialmente y s�lo aparecen
unas escasas copias en Israel y Palestina, como deferencia al
acercamiento entre ambos gobiernos en los meses inmediatamente
anteriores.
M�s cr�pticos son los otros anuncios que aparecen en esos meses:
'Abandonen Todo Arte Ahora' o 'Esperen Nuevas Instrucciones'. Todo se
aclara con el �ltimo anuncio de la serie: 'Se nos ha comunicado que no
han abandonado todo tipo de arte. Por lo tanto hay que tomar una Clara
Acci�n Directa. La Fundaci�n K recompensar� con 40.000 libras (casi
60.000 euros) al artista que haya producido la peor pieza art�stica de
los �ltimos doce meses'.
Conviene recordar que en el Reino Unido se concede anualmente el
Premio Turner, entonces dotado con 20.000 libras (casi 30.000 euros),
al mejor artista del a�o, as� que la afrenta iba claramente dirigida
en esa direcci�n. La Fundaci�n K invita a votar libremente a la gente
y la ganadora resulta ser la misma que la del Premio Turner, Rachael
Whiteread. De todas formas, no comunican su nombre hasta el intermedio
de la retransmisi�n en directo de la entrega del Premio, para lo que
tienen que pagarse de sus bolsillos tres anuncios en televisi�n.
En la misma noche de la entrega del premio oficial, 25 testigos
-cr�ticos de arte y gente de la industria musical- son invitados a
desplazarse a un destino incierto. En principio, el trayecto se
realizar�a en helic�pteros, pero la intensa niebla les impide salir de
su base, as� que son recogidos en siete limosinas.
Al llegar a un descampado, los testigos se encuentran con un lienzo
enorme en el que hay un mill�n de libras (1.450.000 euros
aproximadamente) en billetes de 50 y un par de coches blindados
protegi�ndolo todo y desde los que se escucha incesantemente la
canci�n "Money, Money, Money" de ABBA -otra vez ellos, s�-.
All� se les comunica a los sorprendidos participantes que la
'instalaci�n art�stica', titulada 'Clavado en la madera', ser� vendida
por 500.000 libras (unos 725.000 euros) y que el comprador tendr� de
decidir si se lo queda como trabajo art�stico o se lleva el dinero.
Adem�s, se les proporciona a cada uno 1.650 libras (unos 2.400 euros)
para que las claven en una placa de madera, hasta completar las 40.000
libras del premio; 50 de esas libras (unos 72 euros) son para cada uno
de los invitados como recompensa por participar en el acto. Parte del
dinero, unas 8.000 libras (unos 11.600 euros), desaparecen en la
performance y Bill Drummond y Jimmy Cauty tienen que reemplazar
tambi�n esa cantidad para completar el total ofertado.
Una vez consumada la operaci�n, se dirigen a la Tate Gallery, lugar de
la entrega del premio, y reclaman que la artista Rachael Whiteread
salga. �sta se niega, pero ante la evidencia de que el d�o tiene todo
preparado para quemar el dinero, sale y lo acepta. Posteriormente
declarar�a que se hab�a tratado de un chantaje.
Finalmente, cuando el dinero es devuelto a la ma�ana siguiente al
Banco de Inglaterra, el mill�n de libras es clasificado como
destrozado e inutilizado para su curso legal por los agujeros que se
les han practicado a los billetes. Unas semanas m�s tarde, reciben una
carta oficial en la que se les comunica que han sido multados con
8.000 libras (unos 11.600 euros) de sanci�n por ello.
Incansables, el d�o planea algo m�s. En agosto del 94, acompa�ados
s�lo por su m�nager, Alan Goodrick, y un periodista del diario The
Observer, Jim Reid, se presentan de nuevo en la Isla Jura, esta vez
con un mill�n de libras en sus maletas. Entre las 12:45 y las 2:45 del
23 de agosto queman 20.000 billetes de 50 libras. Nadie es testigo de
su acci�n, aunque su m�nager lo filma todo. El periodista declarar�a
m�s tarde que se sinti� 'aburrido' y 'culpable' mientras se quemaba el
dinero. Tambi�n reconocer�a que los billetes eran aut�nticos y que �l
mismo hab�a acompa�ado al d�o a retirarlos del banco.
D�as m�s tarde, la gente del lugar empieza a encontrar billetes
esparcidos por sus propiedades, as� que la polic�a inicia sus
pesquisas. Conociendo sus antecedentes en la Isla, un sargento llama a
Bill Drummond a Londres y le pregunta directamente si ha sido �l. �ste
le responde que se pondr� en contacto con su socio Jimmy Cauty antes
de responder, aunque nunca devuelve la llamada. El sargento tampoco
insiste despu�s de descubrir que el hecho no est� tipificado como
delito.
La pel�cula resultante de la filmaci�n nunca se proyecta
comercialmente, pero s� se puede ver en pases privados en escuelas,
prisiones o albergues para gente sin recursos. Aunque la pel�cula no
tiene sonido, en cada ocasi�n se acompa�a de un peque�o montaje con
t�teres, animales... A cada exhibici�n le sigue un turno de preguntas y respuestas en las que The KLF aceptan todo tipo de cuestiones, aunque
se niegan a contestar la mayor�a.
Las cenizas resultantes de la quema del dinero se transforman en un
ladrillo que presentan como una 'obra de arte'. Por su parte, los
comentarios del p�blico a las proyecciones se convierten en un libro
con im�genes de la pel�cula titulado Viendo como la Fundaci�n K quema
un mill�n.
A partir de ese momento, el d�o acuerda desaparecer totalmente de la
vida p�blica durante tres a�os. Antes, para dejar constancia de su
decisi�n, pintan en una furgoneta un contrato para poner fin a la
Fundaci�n K durante los pr�ximos 23 a�os. Acto seguido, la furgoneta
es arrojada al Oc�ano Atl�ntico.
Hasta mediados de 1997 no se tienen noticias de ellos. En ese momento,
dos anuncios en la revista de ocio de la capital brit�nica Time Out
avisan que el 2 de septiembre de ese mismo a�o habr� una actuaci�n
�nica de Bill Drummond y Jimmy Cauty en la Sala Barbican de Londres.
El texto de aquellos dos anuncios dice as�: 'Est�n de vuelta. Los
Creadores del Trance. Los Se�ores de lo Ambiental. Los Reyes del House
para los Estadios. Los Padrinos de Techno-Metal. El Grupo M�s Grande
de Rave del Mundo que Jam�s Ha Existido'.
Los que acuden saben que no ser� una actuaci�n normal, y por supuesto
que no lo es. El d�o se presenta como ancianos en sillas de ruedas
motorizadas, con un cuerno gigante en la cabeza, y ofrecen un
concierto de tan s�lo 23 minutos en los que interpretan una �nica
canci�n, su nuevo single, "Fuck The Millenium" ("Qu� se joda el
milenio").
Unos d�as m�s tarde, una pintada con ese mismo texto aparece cubriendo
las paredes del Teatro Nacional Brit�nico. Los responsables del
teatro, desconocedores de las andanzas del d�o, manifiestan ignorar de
qu� se trata y aseguran que piensan "que puede ser obra de seguidores
de la Princesa Diana disgustados por su reciente fallecimiento".
A finales de ese a�o, abren una l�nea telef�nica para que el p�blico
responda si el d�o debe o no 'joder' el milenio. Como la respuesta
mayoritaria es positiva, se proponen erigir una torre de ladrillos de
unos 50 metros de alto, llamada la Pir�mide de la Gente, con el fin de establecer un contraste con el Domo del Milenio que est� a construir
el gobierno brit�nico.
Su aventura se despide con un single editado en las �ltimas semanas de
1999, justo antes del cambio del milenio, grabado conjuntamente con
Fat Les bajo el nombre de Solid Gold Chart Busters (S�lidos creadores
de �xitos de oro) y basado en el sonido repetido de un tel�fono m�vil.
As� hasta ahora, aunque conviene estar al acecho con esta c�lula
irrepetible y totalmente imprevisible.
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A reveure!!
Enric
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